El estado de Guanajuato aloja un espacio inspirado en los sueños de Tim Sullivan, un auténtico creador de ideas oníricas; nos referimos a Ranchito Cascabel, un rincón secreto a 20 minutos de San Miguel de Allende capaz de cautivar y hacer volar la imaginación de todo aquel que pone un pie en él gracias a su mágica atmósfera.
Aunque algunos adjudiquen este espacio de ensueño únicamente al movimiento surrealista, Ranchito Cascabel resguarda en sus rincones inspiraciones de otras corrientes como el Art Nouveau y el arte abstracto.
Ranchito Cascabel nace de la idea de crear un lugar acogedor para convivir en familia. El deseo del director y productor de cine, Tim Sullivan, era construir una estancia para relajarse y convivir con sus hijos, misma que aún no está 100% terminada, pero que se mantiene fiel a los deseos del estadounidense.
Para contarnos un poco de su historia, charlamos con Tim Sullivan y el arquitecto Steve Kornher, las dos mentes principales detrás del mítico espacio.
Tim nos cuenta que el lugar solía ser una gran bodega que, con ayuda Steve y el diseñador Bob Hoss fueron transformando en la magnificencia que es ahora:
“Conocí a Steve en un viaje a Barcelona y quedé perplejo con el trabajo que hacía en Flying Concrete, siempre estuve interesado en esas ideas tan locas que llevaba a cabo y entre pláticas, le hablé sobre una propiedad que había adquirido en San Miguel de Allende y mi profundo interés por crear un espacio nunca antes visto”.
Así fue como comenzó la idea de Ranchito Cascabel. El proyecto comenzó alrededor del año 2000 y aún no se ha concluido; apenas el año pasado integraron un muro con serpientes. Irma Huerta, quién apoya a Tim con todas las visitas guiadas en Ranchito, nos comenta que, en enero del 2020, inició esta última obra.
Irma llegó en el 2018 gracias a un amigo en común con Tim, un escritor que le describió con gran ilusión su travesía por el lugar. En cuanto ella pudo visitar la estancia quedó cautivada y hoy día se encarga de acompañar a los viajeros que deciden sumergirse en la experiencia, además de organizar cada visita.
"Creo que una de las cosas que más atesoro de estar en Ranchito Cascabel es poder acompañar en su experiencia a todo tipo de personas; es siempre diferente, ya sean arquitectos, turistas, niños, abuelos, parejas. Siempre recibo comentarios que vienen desde el corazón.
La primera vez que estuve, tuve una experiencia muy fuerte, como de estar en otro mundo que me obligaba a digerirlo poco a poco, tal vez de aquí mi interés en permanecer. Lo que más admiro de Tim y su trabajo son sus ideas y cómo es que siempre busca crear nuevas cosas aquí.”
Tim siempre tiene una nueva idea, procura rodearse de gente creativa que lo retroalimenta. Es así como amigos y vecinos han contribuido en la integración de artesanías, fuentes, muros, etc., en esta bella propiedad que algunos otros nombran con cariño Timmyland, un apodo que Tim comparte entre risas.
“Muchas de las cosas aquí incluidas tienen un significado personal para mí, como las serpientes, que fueron diseñadas por Bill Montgomery, un amigo artista de Texas experto en reptiles, quien me ayudó a representar de una forma artística, más no temerosa, a estos virtuosos animales”, comenta Sullivan.
Aunque su imaginación fluye, siempre hay planeación arquitectónica de por medio, llevando la técnica y materiales más allá de lo que son. Ranchito Cascabel es también una construcción sustentable que cuenta con captación de lluvia y paneles solares, por poner algunos ejemplos.
“La belleza de estar en San Miguel, el campo, la calidez de la gente, la libertad de los recursos como el arte, la fauna, la flora, etc., han sido perfectos estímulos para creer que todo es posible”, nos comenta Tim.
La llegada a este mítico sitio en Montecillo de la Milpa está un poco escondida. Lo más recomendable para conocerlo es contratar un tour directamente con Irma Huerta, quien es la encargada de agendar todas las visitas.
Lo ideal es agendar los tours con un periodo de un mes a una semana de anticipación. El tour está programado para dos horas e incluye un recorrido guiado de 40 minutos y el tiempo restante es destinado para que los visitantes exploren el lugar, vivan la experiencia, disfruten y se relajen.