En un ámbito aún dominado por hombres, destaca el nombre de Zaha Hadid, maestra de la arquitectura deconstructivista que dejó huella en diversas partes del mundo.
Sus creaciones han impactado de tal manera que en el año 2004 se convirtió en la primera mujer en ser condecorada de manera individual con el Premio Pritzker, considerado para muchos como el equivalente al Premio Nobel en la rama arquitectónica.
La también llamada “la dama de hierro” nació en Bagdad, Irak, pero pasó la mayor parte de su vida en Gran Bretaña, donde formó su profesión. Estudió en la Architectural Association de Londres y tuvo como profesores a especialistas destacados en este ámbito, como Rem Koolhaas y Elia Zenghelis.
Pasó a la historia como una visionaria con creaciones que alientan a la libertad radical de la forma, peculiaridad del deconstructivismo.
Inauguró su propio estudio, Zaha Hadid Architects en 1980 en Londres. Sin embargo, su fama a nivel mundial la logró en el año 1988, cuando tuvo la oportunidad de exhibir sus dibujos en la exposición titulada “Deconstructivismo en la Arquitectura” en el museo MoMA de Nueva York.
Gracias a este evento, logró impresionar a Rolf Fehlbaum, dueño de la empresa alemana Vitra, quien le dio la oportunidad de construir su primer proyecto en 1994, la estación de bomberos de su fábrica.
Un ataque al corazón la arrebató de este mundo a sus 65 años, pero su esencia persiste en el prestigio de sus obras que llegaron a diversos países del mundo como China, Italia, Alemania, Estados Unidos, España, entre otros más.
Este 2022 se cumplen seis años de su partida, el 31 de marzo de 2016. En este país podemos recordarla al ver su trabajo en la Torre Bora, ubicada en Santa Fe, Ciudad de México.
Sus construcciones son consideradas futuristas y parecen desafiar a las leyes de la física. Incluyen fachadas con formas curvas que destacan a la vista, y creaciones con materiales como el acero y hormigón.
Logró ángulos agudos sólidos y a la vez tan ligeros que parecen flotar. El estilo innovador la caracterizó y sigue vigente gracias a que su estudio sigue activo, dirigido ahora por su único socio en vida, Patrik Schumacher.
Gran parte de sus obras más destacadas se realizaron o concluyeron después de su fallecimiento. Sin embargo, su marca es inconfundible.
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Entre sus trabajos más destacados a nivel mundial se encuentran el Centro Heydar Aliyev, en Azerbaijan; el Centro Acuático de Londres para los Juegos Olímpicos de Verano 2012, en Reino Unido; el Museo de Artes del siglo XXI (MAXXI), en Italia; y la Casa de la Opera Guangzhou, ubicada en China.
Pero su genialidad no se limitó a la arquitectura, ya que como una Da Vinci moderna, diseñó varios objetos de interior con su toque característico. Entre éstos, una silla que parecía hecha de agua llamada “Liquid Glacial” e incluso el automóvil Z.CAR con un prototipo futurista de tres ruedas impulsado por hidrógeno.
También era apasionada del mundo de la moda, ambiente en el que también incursionó. Diseñó bolsos, zapatos, botellas de perfume e incluso escenografías para desfiles de moda. Su vestuario siempre fue extravagante, ya que procuraba mostrar la misma pasión que en sus obras.
Zaha Hadid, quien en 2012 fue condecorada por la reina de Inglaterra como Comendadora de la Orden del Imperio Británico, dejó cincelado su nombre en el muro de honor de la arquitectura moderna.
Referencias:
https://www.admagazine.com/arquitectura/zaha-hadid-la-arquitecta-britanica-que-transformo-la-arquitectura-geometrica-20191128-6220-articulos