La construcción modular está transformando la manera en que se edifican viviendas, hospitales, escuelas y oficinas en todo el mundo. Esta metodología, basada en la fabricación de módulos prefabricados en fábricas y su ensamblaje en el sitio final, ofrece una alternativa rápida, eficiente y sostenible frente a la construcción tradicional.
Países como Suecia y los Países Bajos han adoptado ampliamente este modelo, con hasta un 50 % de sus edificaciones construidas mediante esta técnica. Mientras tanto, en España, aunque solo representa el 2 % de las viviendas entregadas, se proyecta un crecimiento significativo en la próxima década. En México, esta tendencia aún es incipiente, pero la creciente demanda de vivienda, la escasez de mano de obra y la necesidad de optimizar costos y tiempos de construcción hacen de la construcción modular una oportunidad clave para el sector.
Beneficios de la construcción modular
La construcción industrializada se diferencia del modelo tradicional por su eficiencia, precisión y sostenibilidad. Al realizarse en entornos controlados, se reducen los desperdicios, se optimizan materiales y se mejora la seguridad laboral.
Además, los plazos de entrega se acortan considerablemente: mientras que una vivienda convencional puede tardar hasta tres años en estar lista, una casa modular puede construirse en pocos meses.
Esto beneficia tanto a los compradores como a inversionistas y promotores, quienes ven un aumento en la rentabilidad de sus proyectos debido a la reducción en tiempos de ejecución y costos imprevistos.
Otro factor clave es la flexibilidad de esta técnica; desde pequeñas casas hasta grandes desarrollos urbanos, la construcción modular permite adaptarse a diversas necesidades. Incluso en situaciones de emergencia, esta metodología ha demostrado su eficacia, proporcionando soluciones habitacionales en tiempo récord.
La construcción modular ha sido clave en la expansión de centros de datos y naves logísticas en países como España. Empresas como Tecnyconta han participado en la construcción de centros de datos para Amazon en Aragón y en la ampliación de naves logísticas para Inditex, utilizando prefabricados de hormigón que aportan versatilidad y sostenibilidad a estos proyectos. En los Países Bajos, el uso de esta técnica ha permitido una rápida expansión de soluciones habitacionales y comerciales, optimizando espacios y garantizando calidad estructural.
Otro aspecto innovador de la construcción modular es la creación de edificios reubicables, también conocidos como edificios de quita y pon. Dichas estructuras pueden desmontarse y trasladarse a nuevas ubicaciones según las necesidades del momento.
Su utilidad ha sido clave en situaciones de emergencia, como desastres naturales o eventos de gran escala, donde se requieren instalaciones temporales, como hospitales, escuelas u oficinas; su versatilidad permite reutilizar los módulos en diferentes emplazamientos, aunque su reubicación requiere estudios previos para garantizar su integración en el entorno. A pesar de los desafíos logísticos y regulatorios, la capacidad de desmontar y trasladar estas construcciones representa un gran avance en la eficiencia y sostenibilidad del sector.
México: una oportunidad de crecimiento
El mercado mexicano de la construcción enfrenta desafíos significativos, como la falta de vivienda accesible y el envejecimiento de la fuerza laboral en el sector; pues según el Banco de México, el país requiere alrededor de 600,000 viviendas nuevas anualmente para equilibrar la oferta y la demanda. La construcción tradicional no ha logrado cubrir esta necesidad de manera eficiente; aquí es donde la construcción modular emerge como una solución viable y escalable.
Diversas empresas están comenzando a incursionar en este modelo en México, enfocándose en la rapidez y la reducción de costos. Además, el sector público también ha mostrado interés en esta alternativa; de hecho, recientemente, el gobierno anunció iniciativas de financiamiento para proyectos de construcción industrializada, con el objetivo de hacer frente a la crisis de vivienda y fomentar la innovación en el sector.
Si México sigue los pasos de países como España y los Países Bajos, donde la construcción modular ha permitido reducir costos y tiempos de entrega en grandes proyectos urbanos y comerciales, el crecimiento de esta metodología podría acelerarse.
En los Países Bajos, por ejemplo, el uso de prefabricados ha optimizado la eficiencia energética y ha permitido desarrollar edificaciones más sustentables, adaptadas a las nuevas regulaciones ambientales. En España, se proyecta que el 10 % de las nuevas viviendas para 2030 sean modulares, lo que refleja el potencial de esta tendencia.
Retos y perspectivas futuras
A pesar de sus ventajas, la construcción modular aún enfrenta retos en México, como la percepción pública y la adaptación de normativas a esta nueva metodología; dado que muchas personas aún asocian lo prefabricado con construcciones temporales o de menor calidad, un mito que debe desmontarse con información y casos de éxito. Además, la integración de estos proyectos en el entorno urbano requiere estudios y regulaciones que permitan su implementación a gran escala.
El futuro de la construcción en México dependerá de la capacidad del sector para adoptar nuevas tecnologías y modelos eficientes. Con el crecimiento de la demanda de vivienda y la necesidad de modernización, la construcción modular tiene el potencial de cambiar las reglas del juego, ofreciendo edificaciones más rápidas, económicas y sostenibles.
Referencia:
Varea, R., Varea, R., & Varea, R. (2025, 23 febrero). El futuro de las obras es modular. El País. https://elpais.com/extra/infraestructuras/2025-02-23/el-futuro-de-las-obras-es-modular.html