- López Obrador recorrió la segunda etapa del Tren Maya y destacó el imponente puente sobre el río Usumacinta.
- Un puente de 160 metros se erige para que el Tren Maya cruce este río, obra de la empresa Mota-Engil.
- López Obrador resaltó los avances del Tren Maya, obra insignia del gobierno de la Cuarta Transformación para el sureste.
El presidente Andrés Manuel López Obrador realizó el pasado domingo 31 de diciembre, un recorrido por la nueva ruta del Tren Maya (Cancún, Quintana Roo a Palenque, Chiapas), oportunidad en la que destacó con orgullo la construcción del imponente puente que cruza el caudaloso río Usumacinta en el espectacular cañón de Boca del Cerro.
Este enorme afluente, el más extenso de México, marca el límite natural entre los estados de Chiapas y Tabasco, para finalmente desembocar en el Golfo de México. A lo largo de sus exuberantes riberas floreció la gran civilización maya y también fue testigo de trágicos episodios, como el traslado y posterior asesinato del último gobernante azteca Cuauhtémoc a manos de Hernán Cortés.
Para efectuar el cruce del Tren Maya sobre el poderoso Usumacinta se construyó un moderno puente de 160 metros de longitud, obra del conglomerado portugués Mota-Engil México. Este viaducto de color amarillo se erigió aplicando avanzada ingeniería nacional, sin afectar al emblemático Puente Boca del Cerro, edificado en 1950 y considerado monumento histórico del país.
El mandatario elogió la destacada ingeniería mexicana involucrada en esta ambiciosa construcción, gracias al extraordinario trabajo de la reconocida empresa jalisciense Recal y la colaboración de la empresa ferroviaria francesa Alstom, con sede en Ciudad Sahagún, Hidalgo. Asimismo, enfatizó con enorme participación de trabajadores, técnicos e ingenieros mexicanos, incluyendo al Ejército Mexicano, quienes hicieron posible esta vital conexión ferroviaria para el sureste del país.
Cada unidad articulada del Tren Maya cuenta con siete modernos vagones que pesan 50 toneladas cada uno, por lo que en total transitan 350 toneladas de peso por este puente que cruza el imponente Usumacinta. Esta robusta estructura requirió de 2,200 toneladas de acero y 9,800 metros cúbicos de concreto para soportar la pesada carga.
Durante una parada en Boca del Cerro, donde se construye una de las estaciones del Tren Maya, López Obrador anticipó que en este estratégico punto los viajeros podrán abordar lanchas para recorrer el caudaloso Usumacinta y adentrarse en su espectacular selva, rica en historia y biodiversidad.
El primer mandatario presenció la llegada del moderno Tren Maya a la majestuosa zona arqueológica de Palenque, tras un recorrido de 10 horas y 45 minutos desde Cancún, culminando así el primer tramo de esta magna obra que busca impulsar la conectividad, el turismo y el desarrollo del sureste mexicano.
Si bien restan por inaugurarse tres tramos del Tren Maya (los tramos 5, 6, y 7 serán inaugurados en febrero de este año), el presidente ha destacado los avances en los más de 1,500 kilómetros de vías férreas que recorrerán Quintana Roo, Campeche, Yucatán y Chiapas. Este ambicioso proyecto, insignia del actual gobierno, muestra el compromiso con el progreso de las regiones del país tradicionalmente más rezagadas.
Detalle de los próximos tramos por inaugurar (29 de febrero):
El tramo 5: Cancún Aeropuerto a Tulum (Quintana Roo)
El tramo 6: Tulum a Chetumal Aeropuerto (Quintana Roo)
El tramo 7: Chetumal Aeropuerto a Escárcega (Campeche)
