Desde que se implementaron las NOM, el consumo de energía se ha reducido en 40%, de acuerdo con la CONUEE.
Una de las grandes preocupaciones en la industria de la construcción es la aplicación de la normatividad para tener construcciones de mejor calidad, pero 95? los municipios no cuentan con reglamentos de construcción, y donde los hay, muchas veces no se cumplen.
El Artículo 115 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos otorga soberanía a los municipios para regirse y los faculta para crear su propio reglamento de construcción:
Art. 115 III. Los municipios estarán investidos de personalidad jurídica y manejarán su patrimonio conforme a la ley. Los ayuntamientos tendrán facultades para aprobar, de acuerdo con las leyes en materia municipal que deberán expedir las legislaturas de los Estados, los bandos de policía y gobierno, los reglamentos, circulares y disposiciones administrativas de observancia general dentro de sus respectivas jurisdicciones, que organicen la administración pública municipal, regulen las materias, procedimientos, funciones y servicios públicos de su competencia y aseguren la participación ciudadana y vecinal.
Art. 115 V. Los Municipios, en los términos de las leyes federales y Estatales relativas, estarán facultados para:
- f) Otorgar licencias y permisos para construcciones.
Aunque en cada ayuntamiento deberían tener su reglamentación, se puede observar que no todos tienen en el sitio web de la Sociedad Mexicana de Ingeniería Estructural (SMIE), donde además se pueden consultar algunas Normas Técnicas Complementarias.
El Reglamento de construcción de la Ciudad de México es el que se considera más completo y por ello se ha retomado en otros lugares, sobre todo, donde no cuentan con un equipo que pueda desarrollar documentos de esta índole.
Asimismo, para esta industria cuenta las Normas Oficiales Mexicanas (NOM), que son regulaciones técnicas obligatorias que las dependencias federales pueden ejercer sobre materiales, productos, procesos, métodos, instalaciones, servicios, sistemas o actividades relacionadas con la seguridad, la salud, así como el cuidado del medio ambiente.
Adicionalmente hay Normas Mexicanas (NMX), que son especificaciones de la calidad de productos, procesos o servicios, las cuales son promovidas por instancias como el Organismo Nacional de Normalización y Certificación de la Construcción y Edificación, S.C. (ONNCCE), pero no son de carácter obligatorio.
Normatividad y sustentabilidad
¿Pero qué tan avanzada está la normatividad en México y cuál es su repercusión en el tema de sustentabilidad? El director general de la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía (CONUEE), Odón de Buen Rodríguez, relata: “En México tenemos desde hace más de 25 años la Ley Federal sobre Metrología y Normalización, ahí deriva una facultad de la Secretaría de Energía (Sener), que es delegada a la CONUEE, que es la elaboración de Normas Oficiales Mexicanas de Eficiencia Energética, con la idea de que permitan conservar los recursos no renovables”.
Expone que en México se han diseñado varias NOM que tienen un sistema en cumplimiento con laboratorios. Hay aproximadamente 80 laboratorios de pruebas y 10 organismos de certificación, todos acreditados ante la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA).
Odón de Buen explica que el cumplimiento de la normatividad “depende de las autoridades locales que lo deben hacer obligatorio en su reglamento de construcción, pero no hay obligación, por la propia Constitución, de los municipios de hacer lo que les diga el gobierno federal en este tema”.
En envolventes de edificios, por ejemplo, se cuenta con dos normas: una para edificios comerciales y otra para residenciales.
La CONUEE ha hecho esfuerzos para que los arquitectos apliquen la NOM 008, que es la de edificios comerciales, pero a la hora de implementar los lineamientos resulta que hay que convencer a las autoridades locales para integrar esto al reglamento de construcción, lo cual ha sido muy difícil.
Sin embargo, hay aspectos positivos, “hoy en día, los equipos que representan el 80?l consumo en el sector residencial, tienen NOM: lavadoras, refrigeradores, lámparas, etc. (…) y se ha reflejado que el consumo de energía ha disminuido en 40?sde que se empezaron a integrar las NOM”, señala Odón de Buen.
Incentivos a la construcción sustentable
Aunque elegir productos que sean sustentables no siempre es obligatorio, hay dependencias que han impulsado estas acciones, como la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF) a través de la EcoCasa.
Hasta mayo de 2019, el programa EcoCasa había logrado los siguientes resultados:
- 63,986 Viviendas certificadas (54,981 viviendas financiadas, 85%)
- 75 Desarrolladores
- 222 Proyectos
- 22 Estados
- 047 MtCO2e Reducción de emisiones sobre la vida útil de la vivienda
- 249,545 Mexicanos beneficiados
Esto ha ayudado para que los desarrolladores también busquen incentivos, pues al edificar vivienda verde, se les otorgan financiamientos a fondo perdido.
Otra de las alternativas que está promoviendo la integración de productos que cuenten con normas sustentables es la Hipoteca Verde del Infonavit.
Este apoyo es un monto adicional en todos los créditos de este instituto que se otorgan para que el derechohabiente reduzca sus consumos de agua, luz y gas, mediante ecotecnologías que tenga la vivienda, o bien, puede integrar algunos productos a partir de la lista que promueve el Infonavit.
Entre las ecotecnologías disponibles están: inodoros, luminarias, calentadores solares, aislantes térmicos, refrigeradores, lavadoras y otros equipos.
En este sentido, los proveedores de la construcción también han buscado mejorar la calidad de los productos. Hoy existen recubrimientos, sistemas de aire acondicionado o calefacción, y ventanas que permiten tener una temperatura más agradable dentro de los inmuebles.
Considerar las normas de construcción en las edificaciones también ha funcionado para dotar de mayor seguridad a las edificaciones, porque se incluyen productos más resistentes y procesos eficientes en la construcción.
En general, los involucrados en el sector consideran que en México ha habido avances en el tema de normatividad, sin embargo, aún hay muchos retos, pues la tecnología está cambiando constantemente y es necesario que la construcción se adapte a estas innovaciones.