Los elementos prefabricados, por su rapidez de armado, hacen posible la atención inmediata de personas infectadas con coronavirus.
Hace unos meses veÃamos un poco lejana la realidad que se vivÃa en China con el brote del COVID-19, pero hoy es preciso buscar soluciones ante la ya declarada pandemia por la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 11 de marzo de 2020.
En el mundo, al corte del 8 de abril, más de 1.5 millones de personas se han contagiado del nuevo coronavirus, mientras que más de 87,000 han fallecido, según el conteo de la Universidad Johns Hopkins.
Ya en México, el 28 de febrero se presentó el primer caso de COVID-19 y al 8 de abril se registraron 3,181 casos confirmados y 174 defunciones a causa de esta nueva cepa, con cifras de la SecretarÃa de Salud.
Ante esta situación, es necesario que los pacientes comunes no sean atendidos en los mismos lugares que las personas infectadas con el COVID-19 ya que esto aumentarÃa exponencialmente el número de casos positivos, tanto de pacientes como del mismo personal médico.
Una de las soluciones que se podrÃan dar es la creación de espacios temporales con unidades modulares como las que provee WillScot, que ante la emergencia por el coronavirus ha dispuesto de varios productos que consiguen hacer frente a la situación de manera inmediata y que están disponibles en México:
Módulos para información. Con espacios creados con elementos prefabricados se puede dar información general a las personas, por ejemplo, afuera de las clÃnicas del sector salud.
Consultorios móviles. SerÃan de gran utilidad afuera de los hospitales para eliminar el riesgo de contagio, ya que este es uno de los principales temores de quienes acuden a citas regularmente porque padecen enfermedades crónicas y requieren cuidados continuos.
También se podrÃan ocupar estos espacios en comunidades rurales pequeñas donde no cuentan con servicios médicos.
Los consultorios móviles se pueden hacer, por ejemplo, con sistemas como Flex, que se construye hasta 75 veces más rápido que otros y se adaptan según las necesidades que se tengan.
Laboratorios. Con Flex, igualmente es posible generar laboratorios con unidades modulares prefabricadas. De esta manera, la detección del Covid-19 serÃa de una manera más ágil en diversos puntos de la República Mexicana.
Hospitales temporales. Para una mejor atención de los pacientes –asàcomo se hizo en China– es preferible edificar hospitales exclusivos en donde sólo haya personas infectadas con coronavirus, de esta manera la recuperación es más sencilla porque ahà se integran desde camas, respiradores y todo el equipo médico indispensable.
Asimismo, resulta más útil para la parte de la higiene, ya que estos sistemas se limpian fácilmente. En estos casos, se emplean edificios modulares cuya ventaja es que se arman en sitio rápidamente porque son estructuras metálicas muy versátiles.
Por otra parte, se pueden adecuar en un espacio externo, algunos dormitorios temporales para el personal médico, asà como oficinas móviles.
Almacenes. Para guardar insumos para los hospitales o incluso alimentos no perecederos para comunidades vulnerables, los contenedores son una opción eficaz porque se usan inmediatamente.
Otros beneficios que aportan estos productos es que tienen aislamiento acústico y térmico, además de que no son inflamables, lo cual los hace más seguros.
Asimismo, la mayorÃa se tienen ya armados y sólo se llega al sitio a instalarlos. En el caso de que se deba mover de lugar, por su diseño, las unidades modulares se pueden cambiar fácilmente en el terreno e inclusive si en alguna comunidad ya no se requieren, es posible trasladarlas a otra zona.
Otra ventaja es que disminuyen hasta 50% en costo de envÃo y algunos sistemas pueden ser rentados o comprados.
La viabilidad de estos sistemas ya está probada, pues han sido muy utilizados en otros paÃses para fines médicos, o en México durante la construcción de obras de infraestructura grandes en donde se requieren oficinas, baños y campamentos temporales para que los ocupen los trabajadores.